El amor que nos dan los animales es incuestionable. Pero es que además son capaces de ayudar a niños y adultos a superar o mejorar diversos trastornos y problemas de salud. Os hablamos de los animales de terapia.
La zooterapia, o terapia asistida con animales, consiste en realizar actividades terapeúticas, rehabilitadoras, psicopedagógicas e integradoras que, en el caso de los niños, son especialmente beneficiosas.
¿QUÉ BENEFICIOS TIENEN LOS ANIMALES DE TERAPIA PARA LOS NIÑOS?
Actualmente estos animales se utilizan en diferentes ejercicios con muchas finalidades. Cada especie utilizada, y según se interaccione con ella, produce unos estímulos determinados.
Estos son los animales utilizados con mayor frecuencia en las terapias:
Los perros
Son los animales más versátiles. Gracias a su inteligencia, sensibilidad y cariño incondicional, pueden colaborar en variedad de actividades rehabilitadoras y psicopedagógicas.
El caso más llamativo es el de los perros lazarillo, que ayudan a los niños con deficiencias visuales a tener una mejor calidad de vida. Pero muchos otros perros se utilizan para estimular las capacidades cognitivas, emocionales y sociales en niños con Síndrome de Down, retrasos mentales y Trastorno del Espectro Autista.
Incluso se utilizan en hospitales para crear un ambiente más positivo y estimular la recuperación de los pacientes.
Los caballos
Utilizar caballos en terapias con niños y adolescentes consigue logros a nivel social, cognitivo, neuromuscular y emocional. Pero también se ha demostrado que alivian el dolor de enfermedades degenerativas.
De hecho, los caballos ya eran utilizados en la Antigua Grecia para ayudar en la rehabilitación tras un accidente, o controlar los síntomas de enfermedades físicas y mentales.
Los gatos
Acariciar un felino estimula la capacidad cognitiva y la memoria, y además ayuda a los niños en su aprendizaje e integración social.
Y con su ronroneo producen un efecto relajante y tranquilizador, que en el campo de la medicina ha dado excelentes resultados para el tratamiento de enfermedades cardíacas, psicológicas o la hipertensión.
Los pequeños roedores: hámsters, conejos y conejos de Indias
Su gran ventaja es que, debido a su pequeño tamaño, son animales que no generan miedo. Además, tienen un comportamiento equilibrado y son fáciles de cuidar.
¡Excelentes para que los niños más pequeños tengan un primer contacto con los animales!